EL QUIJOTE EDUCA: crónica de una experiencia de educación en valores.
Crónica de una experiencia de educación en valores con el Quijote.
Reseña para la Revista del IES <Las Rozas I>. 20 de diciembre de 2005.
Dibujo original de la alumna LAURA NEIRA.
“El Quijote en el aula”.
Con motivo del IV Centenario de la publicación de la primera parte de la novela más universal de Cervantes, El Quijote, mi homenaje ha sido leerla en el aula con los alumnos de Ética, lo cual significa que miramos a don Quijote y Sancho Panza con los ojos de Antonio Machado: “a la ética por la estética”. Hicimos una lectura dramatizada de cuatro aventuras: la del caballero solidario y el zagal maltratado, para tratar los derechos del niño y la solidaridad con los más débiles; la aventura de los molinos para ver el poder de la imaginación de don Quijote sobre la realidad, y la prudencia de Sancho para avisarle del peligro y socorrerle tras el batacazo contra las aspas del molino; el amor imposible de Grisóstomo y Marcela, para tratar el derecho de la mujer a ser libre como persona, y por último, los sabios consejos de don Quijote a su amigo Sancho para ser buen gobernador de la ínsula de Barataria, e impartir justicia en libertad. También en Psicología de 2º de bachillerato los alumnos han hecho un trabajo sobre la psicología de los personajes de El Quijote. Los trabajos de los alumnos incluyen ilustraciones y dibujos de los personajes de la novela, y una reflexión crítica personal sobre los valores humanos que descubre cada uno en las distintas aventuras, para que se animen a leer El Quijote.
Dibujo original de la alumna ANA MELÓN.
Esta experiencia no es nueva como educación en valores, he visto en la exposición “El Quijote en las aulas”, organizada por la Fundación Francisco Giner de los Ríos (Institución Libre de Enseñanza), que existe una larga tradición pedagógica desde finales del s. XIX, tanto en la enseñanza primaria y secundaria como en bachillerato, con múltiples ediciones ilustradas del Quijote al alcance de niños y jóvenes, y trabajos muy creativos de gran valor literario, estético, ético e histórico. Decía D. Marcelino Menéndez Pelayo, en su Discurso acerca del Quijote y de Cervantes que, “Don Quijote se educa a sí propio, educa a Sancho y el libro entero es una pedagogía en acción, la más sorprendente y original de la literatura”. Por último, quiero recordar otro centenario del que no se ha hablado nada, el de Emmanuel Mounier (1905-1950), fundador del personalismo comunitario, del que he sido siempre fiel seguidor en mi acción educativa que se fundamenta en su pregunta: “¿Cuál es la meta de la educación? No es hacer sino despertar personas”. Invito a todos los que no hayan leído El Quijote a que lo hagan, no sólo descubrirán su auténtica persona a través de los personajes, sino que, como dice el poeta Luis Rosales, quien lee El Quijote recobra la esperanza, y la esperanza la necesitamos todos, unos para esta vida, y otros, para la otra vida.
José María Callejas Berdonés, profesor de filosofía.
Dibujo original de la alumna MERCEDES BORGES.